Para el Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad (MPJD), el año que está por concluir tuvo momentos muy dolorosos, pero también avances importantes en la búsqueda por visibilizar los efectos negativos de la estrategia de seguridad pública del gobierno federal, lo que lo ha hecho posicionarse con fuerza ante la sociedad civil y la clase política.
Así lo afirmó el editor y escritor Rocato Bablot, integrante del colectivo dirigido por el poeta Javier Sicilia, quien hizo un balance de lo realizado en 2011, y anunció que el año próximo realizarán diversas reuniones regionales, como preparativo de un encuentro nacional.
Definitivamente este fue un año de altibajos. Por un lado, tuvimos un gran encuentro con la parte más contundente y profunda de la sociedad, con una gran cantidad de víctimas, testimonios y dolores, y eso ha hecho que tengamos un impacto muy grande tanto en la clase política como en la sociedad civil
, indicó.
Terrible situación
Las caravanas al norte y sur del país, y la presencia del MPJD en sitios claves en el escenario nacional, como Cherán, Santa María Ostula o Acteal, permitieron a sus integrantes palpar la grave y terrible situación que atraviesa el país, y sobre la cual no quitaremos el dedo del renglón
.
Otros aspectos positivos para el movimiento, señaló, fueron la incorporación de muchas víctimas de la violencia como nuevos activistas por la paz, y el interés y solidaridad que generó entre muchos artistas, como Daniel Giménez Cacho, Julieta Egurrola, Ely Guerra y Jesús Ochoa, lo que ayudó a darle una proyección nacional más amplia.
Por otro lado, el colectivo también debió enfrentar en 2011 momentos muy difíciles, como los asesinatos de Pedro Leyva, Nepomuceno Moreno y Trinidad de la Cruz, la desaparición de Eva Alarcón y Marcial Bautista, y los ataques que los luchadores sociales en general han recibido, así como enfrentar la terquedad gubernamental de mantener una estrategia de seguridad que, como ya se ha documentado, ha sido fallida
.
En 2012, adelantó Bablot, el MPJD promoverá una serie de reuniones regionales de organismos de derechos humanos y de víctimas de la violencia, de cara a un encuentro nacional a realizarse en fecha todavía por definir, donde se insistirá en la necesidad de crear una ley de seguridad que proteja a los ciudadanos, y no sólo a las instituciones.
Lo que queremos es ganar más fuerza y solidez. Muchas de nuestras críticas ya se están tomando en cuenta, como lo demuestran las propuestas de seguridad de la UNAM. Si bien hemos pasado cosas dolorosas, ha valido la pena, y uno debe soportarlas para no defraudar a quienes han caído en la lucha, aseveró
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