Cuestionan los tzeltales la actuación del consejo de derechos humanos de Chiapas

Cuestionan los tzeltales la actuación del consejo de derechos humanos de Chiapas

Solicitaron el desalojo de indígenas que recuperaron la caseta de cobro de Agua Azul, dicen

Hermann Bellinghausen

Enviado

Periódico La Jornada
Sábado 7 de julio de 2012, p. 17

San Cristóbal de las Casas, Chis., 6 de julio.Los ejidatarios tzeltales de San Sebastián Bachajón (municipio de Chilón), adherentes a la Sexta declaración de la selva Lacandona, sostienen que han sido víctimas de la injusticia de diferentes dependencias, y cuestionan seriamente la actuación del Consejo Estatal de Derechos Humanos (CEDH) en torno al desalojo efectuado el pasado 19 de junio por la policía estatal en el ejido, luego de que los indígenas de la otra campañahabían recuperado, fugazmente, la caseta de cobro en el acceso a las cascadas de Agua Azul.

Esto es una evidencia más de cómo instituciones como el CEDH se festinan de la violencia, dicen los ejidatarios, y reprochan al consejo estatal sacar provecho del simple hecho de conocer un poco el camino del sufrimiento de los indígenas, pues anteriormente miembros del organismo gubernamental nos estuvieron acompañando; lo hicieronpara conocer y luego tomarlo como un objeto de valor, algo que para ellos se ha vuelto un negocio.

El CEDH, señalan, es intermediador de los proyectos trasnacionales, generador de violencia, escalera del mal gobierno. En varias ocasiones, añaden,esto lo hemos demostrado las organizaciones.

Recuerdan que durante la violencia y el encarcelamiento injusto de nuestros compañeros, el CEDH siempre ha estado acechando a su víctima, haciéndonos entender que la solución del conflicto era integrarnos al convenio que elaboró el gobierno, y no lograron convencernos. Al suscitarse la represión contra ejidatarios de la otra campaña el 2 de febrero de 2011, los miembros del CEDH se ausentaron, como si no hubiera violaciones de derechos humanos en todas partes. Actúan, aseveran los ejidatarios, bajo las órdenes de las corruptas autoridades del estado.

El pasado 19 de junio, “800 policías preventivos desalojaron violentamente a ejidatarios de la otra campaña por una orden de desalojo solicitada por el CEDH, a petición de Francisco Guzmán Jiménez (Goyito) y del licenciado Héctor Manuel Velasco Santiago, secretario particular del secretario general de Gobierno estatal, Noé Castañón León”. El argumento de la policía era un posible enfrentamiento entre ejidatarios. ¿Pero de cuáles?, se preguntan: “Los únicos que se juntaron eran civiles vestidos de policías que andaban con los ‘preventivos’ para señalar ‘quién dirige el movimiento’”.

El CEDH viola sus propias leyes cuando ordena a la seguridad pública meterse a nuestras tierras para desalojar a los que las defienden del despojo gubernamental. Con ello legitima el trabajo sucio para imponer el megaproyecto en nuestras tierras a través de la fuerza pública, violando también el amparo del ejido. Los ejidatarios consideran a los representantes del organismo títeres del gobernador, que por ahora están llenando sus bolsas mientras al pueblo lo reprimen y le quitan la tierra para vivir. Responsabilizan a esta institución por posibles enfrentamientos.

Y advierten: Hemos demostrado en varias ocasiones que no somos los que provocamos, sino el gobierno en complicidad con autoridades oficialistas del ejido, que pretenden entregar nuestras tierras en manos del gobierno del estado para sus proyectos trasnacionales. Nuestras tierras las vamos a defender, queremos seguir siendo las personas que somos en donde nacimos, porque de aquí no nos vamos