Supera a Tula, Tepeji y Atitalaquia en generación de precursores de lluvia ácida
Alta incidencia de males respiratorios e intestinales
Lunes 4 de abril de 2011, p. 34
Tlaxcoapan, Hgo., 3 de abril. Este municipio de 25 mil habitantes, localizado 65 kilómetros al sur de Pachuca, es el más contaminado del estado, pues en él se producen un millón 839 mil 885 toneladas anuales de emisiones contaminantes de origen industrial, más de 90 por ciento de las cuales provienen de hornos de plantas generadoras de energía y otras fuentes estacionarias.
La demarcación supera en este rubro a Tula (donde se emiten 104 mil toneladas de contaminantes al año), Tepeji del Río (39 mil) y Atitalaquia (8.25 toneladas).
En un inventario de contaminación de suelo, agua y aire en 14 municipios de diferentes regiones de la entidad, científicos del Centro de Investigaciones Químicas de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (CIQ-UAEH) concluyeron que en Tlaxcoapan se produce 94.6 por ciento de las emisiones de óxido de nitrógeno (843 mil toneladas al año) enviadas a la atmósfera por fuentes estacionarias en Hidalgo.
Tlaxcoapan también rebasa por mucho a los otros tres municipios mencionados en cuanto a contaminación industrial del agua, con 35 mil 282 toneladas de desechos anuales, contra 12 mil 452 de Tula, mil 51 de Tepeji y 86 toneladas de Atitalaquia.
Esto se refleja en los registros de salud del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), según los cuales en 2009 se reportaron en el estado un millón 9 mil 199 casos de infecciones respiratorias agudas, 91 mil 264 de infecciones intestinales, 42 mil 616 de gingivitis y 23 mil 947 de amibiasis intestinal.
Según el monitoreo realizado por el CIQ-UAEH en Tlaxcoapan, Pachuca, Mineral de la Reforma, Tulancingo, Cuautepec, Santiago Tulantepec, Tepeji del Río, Tula, Atitalaquia, Actopan, Tepeapulco, Apan, Tizayuca y Villa de Tezontepec, el primer municipio concentra 53 por ciento de la contaminación total, contra 26 por ciento de Tulancingo y 6 por ciento de Tepeapulco.
De acuerdo con un estudio elaborado por un equipo de investigadores encabezados por René Bernardo Elías Cabrera Cruz, realizado en la región de Tula-Tepeji, las fuentes estacionarias localizadas en Tlaxcoapan producen grandes cantidades de precursores de lluvia ácida que se esparcen por los municipios colindantes, con efectos adversos en el ambiente y la salud
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La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) señala en su Informe epidemiológico y ambiental de la región de Tula que en ese municipio, Tepetitlán y Atotonilco, cercanos a Tlaxcoapan, la tasa de morbilidad por infecciones respiratorias agudas supera la estatal, que es de 3 mil 227 casos por cada 10 mil habitantes, pues en la primera localidad la relación es de 6 mil 267 por 10 mil habitantes; en la segunda, de 5 mil 609, y en la tercera, de 3 mil 368.
En Tlaxcoapan el cáncer de hígado y las giardiasis van en ascenso, según la Cofepris, mientras en los nueve municipios restantes del corredor Tula-Tepeji se detectan con mayor frecuencia (el número total no aparece en el reporte de la Cofepris) neoplasias de colon, esófago, páncreas, riñón, vejiga y próstata.
Por lo que respecta a las enfermedades diarreicas, Tlaxcoapan presenta una tasa de 636 casos por 10 mil habitantes, mientras la estatal es de 499.
Un diagnóstico elaborado con datos de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, la Comisión Nacional del Agua y de la Organización Mundial de la Salud, entregado por el diputado federal perredista Luciano Cornejo Barrera, señala que la refinería Miguel Hidalgo y la termoeléctrica Francisco Pérez Ríos emiten 33 veces más dióxido de azufre que todo el valle de México.
Este documento señala que, como resultado de la contaminación atmosférica que genera la industria, niveles de radiactividad superiores a la norma y la acumulación de nitrato de potasio en tuberías y cisternas de agua potable, los casos de cáncer en la zona se han disparado y se han reportado trastornos siquiátricos
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