En 2009 ejidatarios de Amomolulco, municipio de Lerma, promovieron un juicio agrario
Jueves 21 de julio de 2011, p. 44
La Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) dio inicio a la construcción de su quinta unidad académica en terrenos del municipio de Lerma, estado de México, declarados área natural protegida desde 2002, de acuerdo con el decreto presidencial publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF) del 27 de noviembre de ese año.
El documento –cuya copia tiene este diario– establece que la región de las ciénegas del Lerma, que incluye los terrenos de lo que fuera la laguna de Chignahuapan, es una zona de conservación de flora y fauna, por lo que a dichos terrenos no puede darse destino distinto a aquellos que resulten compatibles con la conservación y protección de los ecosistemas
.
Aún así, el 14 de julio autoridades de esta casa de estudios, encabezados por el rector general, Enrique Fernández Fassnacht, acudieron al predio –con una extensión de 25 hectáreas– para colocar la primera piedra de la Unidad Lerma, construcción aprobada por el Colegio Académico de esa institución en mayo de 2009, la cual pretende albergar a 15 mil estudiantes. Sin embargo, no es el único obstáculo que enfrenta la construcción de la quinta unidad de la UAM. Desde 2009, ejidatarios de la comunidad de Amomolulco, municipio de Lerma, promovieron un juicio agrario ante el tribunal unitario correspondiente del Distrito 9, con sede en Toluca, donde se abrió el expediente 640/09, y con base en él se acordó emitir una suspensión precautoria para que las partes se abstuvieran de modificar o alterar el entorno del predio en tanto no se alcance una resolución.
El 11 de julio funcionarios del citado tribunal acudieron a una inspección judicial para determinar si se ha violado la suspensión precautoria, y cuya resolución deberá presentarse en breve.
Ésta es la segunda ocasión en que la UAM enfrenta litigios por la posesión de predios para la instalación de sus nuevas unidades académicas, debido a que éstos se ubican en zonas de conservación o protección ambiental.
En 2006, se suspendieron los proyectos para edificar la unidad Cuajimalpa, en el terreno denominado El Encinal, debido a que se ubica en zona de preservación ecológica, por la cual la Federación erogó 180 millones de pesos.
Despojo y ecocidio
En conferencia de prensa, Fernando Lechuga Osorio, integrante del ejido de Amomolulco, señaló que desde 1943, mediante acuerdo presidencial, publicado en el DOF el 11 de septiembre de ese año, les fueron adjudicadas 44 hectáreas ubicadas dentro del tercer vaso de las lagunas de Lerma, conocida como Chignahuapan, mediante permisos precarios
otorgados por la Secretaría de Agricultura y Recursos Hidrálicos.
Durante 58 años, afirmó, hemos ejercido la posesión de esta tierra, que es de preservación ecológica desde 2002
. Enfatizó que la comunidad de Amomolulco ha sido despojada de forma ilegal e injusta de su tierra, donde se pretende perpetrar un ecocidio
.
Aseguró que como integrantes del Frente de Pueblos Indígenas por la Defensa de la Tierra en el municipio de Lerma presentarán una denuncia contra la UAM ante la Procuraduría General de la República por ecocidio, al destruir un entorno ecológico invaluable y afectar una zona de recarga del acuífero, pero también por desacato, al incumplir la determinación del tribunal unitario agrario
,
El acta emitida por el tribunal unitario agrario, cuya copia se presentó a los medios de comunicación, establece dicha autoridad determinó fijar medidas cautelares hasta en tanto se resuelve el conflicto, por lo que exhorta a las partes a que se abstengan de realizar acciones tendientes a alterar el estado que actualmente guardan las cosas sometidas a la jurisdicción del tribunal
. Sin embargo, agregó Lechuga Osorio, después de dos años de litigios no hay una resolución judicial definitiva que nos afirme que no nos asiste la razón y que no tenemos derecho a pelear nuestra tierras
.
Ignacio del Valle, integrante del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra de San Salvador Atenco, aseguró que apoyarán las acciones de resistencia y dignidad
a que convoquen los pobladores de la comunidad de Amomolulco, porque como campesinos sabemos que les asiste la razón frente a un gobierno federal, estatal y municipal que sólo es títere de los grandes intereses económicos
.
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