Preocupa a expertos distribución sin control de libros en escuelas

Académicos, integrantes del Movimiento por una Educación Popular Alternativa (MEPA), manifestaron su preocupación por la presencia cada vez más evidente de empresas privadas que distribuyen productos editoriales en escuelas públicas sin que haya un control institucional de dichos materiales, como es el caso de los libros de dianética repartidos en Puebla por la Secretaría de Educación Pública local.

En un encuentro celebrado en la ciudad de México, representantes de la agrupación denunciaron otras propuestas sobre materiales de empresas privadas que pretenden colocarse en escuelas públicas de esa entidad.

La práctica es reproducir o enviar una serie de materiales sin mayor control y todo el mundo está comprometido: desde la SEP hasta las escuelas, señaló Hortensia Fernández Fuentes.

Da la impresión de que la SEP asume el papel de intermediario pasivo entre las empresas y las escuelas, pero todo lo que llega a los planteles no llega en calidad de sugerencia sino de acto oficial, apuntó el pedagogo Juan Sebastián Gatti.

Recordó que las autoridades educativas en Puebla retiraron los polémicos materiales a pesar de la defensa a ultranza de que no hicieron nada malo, y anunciaron que harán pública en la página de Internet toda la información referente a nuevos materiales con su correspondiente dictamen, lo cual no está mal, pero no garantiza nada, pues éste corre a cargo de la Comisión Mixta de Escalafón, que nada tiene que ver con la calidad de los materiales educativos.

Este sábado la agrupación efectuó un foro sobre las posibles consecuencias de la política de lectura que propone la SEP en la Reforma de la Educación Básica.

Los ponentes coincidieron en que los mecanismos de evaluación de la habilidad lectora en escuelas primarias y secundarias, en marcha a partir de este ciclo escolar, son incongruentes con los propios programas educativos de la dependencia.

Lamentaron que pretenda evaluarse la competencia lectora de los alumnos a partir del número de palabras leídas en un minuto, dejando en un segundo plano la comprensión del texto