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sábado, 21 de mayo de 2011

ONG piden a Censida que “amistad o rencillas” no influyan en asignación de recursos

  • Vocal del Conasida señala que funcionarios quisieron “dar atole con el dedo” a organizaciones civiles
  • Guillermo Montalvo Fuentes
    José Antonio Izazola y Carlos García de León, funcionarios del Censida
    México DF, mayo 16 de 2011.
    Que el proceso de asignación de recursos federales a organizaciones que trabajan en la lucha contra el VIH no esté condicionado por “amistad o rencillas”, dejar claros los criterios para evaluar los proyectos, así como crear un grupo multidisciplinario para conformar el Equipo Asesor de Revisión de Propuestas, son algunas de las peticiones que activistas hicieron al secretario de Salud federal, José Ángel Córdova Villalobos, luego de denunciar ciertas “anomalías” por parte del Centro Nacional para la Prevención y el Control del VIH/sida (Censida).
    De acuerdo con Oriana López Uribe, vocal suplente del Consejo Nacional sobre Prevención y control del VIH/sida (Conasida), la sociedad civil que trabaja en la lucha contra la epidemia es muy pequeña, “estamos muy interrelacionados y eso puede generar conflictos de intereses, pues por amistad o rencillas se podría evaluar mal la propuesta enviada por alguna organización civil”.
    En entrevista con Letra S Radio en Código DF, Radio Cultural en Línea, la activista subrayó que no tiene conocimiento de que esto haya pasado antes, pero mencionó que eso es lo que se quiere evitar, pues aunque los miembros del equipo asesor del Censida realizan una “evaluación ciega”, es decir, sin conocer el nombre de la organización civil, a través de algunos datos, como el tiempo de existencia o el área de trabajo, se puede deducir de que asociación se trata.
    “Si nos basamos en si me cae mal o quien me cae bien, en vez del impacto que pudiera tener la propuesta, es claro que se afecta a la lucha contra la epidemia”.
    Sobre la respuesta que los vocales del Conasida recibieron por parte del sector Salud, Uribe destacó “cierta disposición” por parte de las autoridades para dialogar, “a pesar de que el secretario no nos contestó, pues la carta que recibimos estaba firmada por José Antonio Izazola, director del Censida y revisada por Carlos García de León, director de Prevención y Participación Social de este organismo, lo cual en un principio calificamos como otra anomalía o falta de interés”.
    La también coordinadora de proyectos de la organización civil Balance, aseveró que la carta recibida como réplica estaba redactada “a la defensiva” por el uso de la palabra “irregularidades” utilizada por los activistas para exigir transparencia en el proceso de asignación de recursos federales -calculado en 43 millones de pesos-, del Censida a las organizaciones civiles mediante selección de proyectos.
    “Con la carta nos quisieron dar atole con el dedo pero posteriormente nos reunimos algunos activistas con Izazola y García de León, donde pudimos entablar un diálogo, y en el que especificamos que no teníamos ninguna intención personal detrás, sólo pedimos trabajar conjuntamente para el beneficio de los ciudadanos, y esto implica mejorar la forma en que se otorgan los recursos a las organizaciones”.
    Por último, López Uribe mencionó que en la reunión sostenida la semana pasada con organizaciones civiles, la actitud de Izazola y García de León fue “irónica y burlona”, aunque mostraron disposición para avanzar en el proceso de solucionar las fallas en el proceso de asignación de recursos.
    Antecedentes
    Vocales de la sociedad civil en el Conasida enviaron en abril pasado una carta al secretario de Salud, José Ángel Córdova Villalobos, en la que expresaron preocupación por las “irregularidades” presentadas durante el proceso de asignación de recursos por parte del Censida a las organizaciones civiles dedicadas a dar respuesta a la epidemia.
    Firmada por ocho de los nueve vocales, la misiva solicitó a Córdova Villalobos transparentar el proceso de asignación de recursos derivado de la VI Convocatoria Pública para el Fortalecimiento de la Respuesta en Prevención de la Sociedad Civil ante el VIH/sida e ITS 2011, publicada en la página del Censida el 22 de febrero de este año y que tiene un monto de 43 millones de pesos.
    Enviada el pasado viernes 8 de abril, la carta pidió al funcionario “claridad” sobre los criterios de selección de proyectos, así como nombre y perfil de quienes conforman el Equipo Asesor de Revisión de Propuestas (EARP) para “garantizar” sus competencias y objetividad, además de evitar posibles conflictos de interés.
    Los integrantes del Conasida también solicitaron conocer los mecanismos, etapas y procesos de evaluación, así como la existencia de manuales o guías para los dictaminadores.

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